RESTAURACIÓN ECOLÓGICA Y PAISAJÍSTICA

La Estrategia de la Unión Europea sobre Biodiversidad (aprobada en 2011) incluía, entre sus principales objetivos, el: “mantenimiento y mejora de ecosistemas y servicios ecosistémicos no más tarde de 2020 mediante la creación de una infraestructura verde y la restauración de al menos el 15% de los ecosistemas degradados”. Nos encontramos sin género de dudas en la década de la Restauración Ecológica.

Con su reciente actualización, la Estrategia de la Unión Europea sobre Biodiversidad para 2030, reconoce nuevamente y refuerza el desarrollo de la infraestructura verde como una de las herramientas principales para el logro de los objetivos medioambientales de la Unión Europea.

La protección y conservación de la diversidad biológica y los ecosistemas, así como la promoción de infraestructuras verdes, son aspectos clave de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y figuran de forma destacada en muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y metas asociadas.

Entre los proyectos de restauración ecológica redactados tanto para administraciones públicas como empresas privadas destacan: Proyecto de Restauración Paisajística y Ambiental de la Zona de Actividades logísticas del Puerto de Valencia, la Restauración de un humedal en Tavernes de la Valldigna que había sido ilegalmente aterrado o el Proyecto de Restauración Paisajística y Ambiental del LIC litoral de Benicàssim.

Hay zonas que han sufrido tal nivel de degradación que su puesta en valor requiere de una restauración dirigida a corregir y suprimir los impactos negativos que dicha zona ha sufrido, potenciando, en la medida de lo posible, la regeneración natural.

En otras ocasiones, estos proyectos se redactan como un complemento de los estudios de impacto ambiental, actuando como un conjunto de medidas compensatorias que deben estar perfectamente combinadas, presupuestadas y sistematizadas para su fácil ejecución.